Diario de la Eurocopa (Día 23)

A cambiar la Historia

29 de junio de 2008. Día histórico para España. La selección de fútbol tiene la oportunidad de volver a ganar un gran torneo, tras 24 años de la última final y 44 años de la última victoria en una Eurocopa. España se ha sacado de encima la urgencia histórica de atravesar la que, hasta ahora, ha sido ronda gafe, los cuartos de final. Luis Aragonés y los suyos se enfrentan a la siempre poderosa Alemania. Los germanos, esta vez, sin embargo, no son los favoritos, y es que la Selección ha mostrado un nivel de juego espectacular, pocos equipos han jugado nunca un gran torneo al nivel que lo han hecho Xavi, Senna, Iniesta, Silva, Torres, Villa, Cesc, Puyol, Marchena, Ramos, Capdevila, Casillas… ni tan siquiera la Brasil de Romario y Bebeto, o la Francia de Platini.

Poco se puede decir en un día como el de hoy. La Roja jugará con el 11 que le ha llevado hasta esta gran final, a excepción de la inclusión de Cesc en lugar de Villa, por obligación, tras la lesión en semifinales, leve pero suficiente para dejarlo fuera hoy. En Alemania todavía tienen la duda de Ballack. El jugador del Chelsea sufre de un golpe en el gemelo y Joachim Low mantendrá la duda durante todo el día, tratando de jugar un poco al despiste sobre el 11 que pueden presentar. Tampoco está claro que juegue finalmente con 2 puntas; parecía ayer que actuarían Klose y Gómez de entrada, dejando a Frings como único pívote defensivo, pero la última información apunta que Gómez seguirá en el banco, y Hitzlsberger actuará ayudando a Frings en tareas de recuperación, para dejar a Ballack si juega por delante, con más libertad de movimientos. En caso que Ballack no jugara, lo haría en su lugar Borowski.

Las apuestas dan como favoritos a España, y predicen un 1-0 para los españoles con gol de Fernando Torres. Nosotros lo firmábamos ya, si hiciera falta. Los de Luis Aragonés son mucho mejores, pero frente a nosotros tenemos un equipo llamado Alemania, con muchas estrellas en la camiseta, y eso, siempre impone.

¡A por ellos!

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